Los Potros de Hierro del Atlante fueron muy diplomáticos en su comunicado, en el que aseguran que jugarán el encuentro de mañana, a pesar de que tienen a su cuerpo técnico infectado de Covid-19.
La realidad es que la directiva azulgrana tocó base para poder aplazar el juego contra el Tlaxcala, pero lo que encontró fue que en el reglamento no se toma en cuenta que el entrenador no esté en la banca como motivo de posposición. Así que ni hablar: los atlantistas deberán encarar el juego sin el jefe, ni sin el segundo al mando, Gastón Obledo.