El coraje por la alineación indebida de Federico Viñas, en el Atlas-América, ya ha pasado en Coapa. Al final, nadie será despedido, ni sancionado por el error que le costó tres puntos a las Águilas, pero este hecho ha provocado que al interior del equipo se revisen formas y procedimientos.
Se ha pedido a Santiago Solari que tenga mucha mayor apertura con el resto del club. Dicen que el «Indiecito» se aisla, que casi no tiene contacto con nadie, más que sus auxiliares y los jugadores, pero esa indiferencia pudo provocar la falta de comunicación a la hora de colocar aquella maldita alineación.