Cualquiera puede fallar un penalti, pero lo que hizo Alan Pulido con Chivas en el juego con la Fiorentina y por el momento que vive Guadalajara se acerca a lo imperdonable.
Es verdad, Pulido le dio al gol al Rebaño para su último título, pero después de eso y también antes, ha vivido más del escándalo que de lo que hace en la cancha.
De Tigres se fue mal. Se quedó con el estigma de que se falsificó una firma para entrar en controversia y así irse a Europa, dónde pasó poco o nada con él.
En su regreso a México tuvo que doblar las manitas, verle la cara a los felinos que al final cedieron, y no conforme con eso cada vez que puede se burla del club que le dio la posibilidad de ser profesional.
Y no acaba ahí. Adicto a las redes sociales, ha dejado que en estas se evidencie sus fallidas relaciones, sus bromas en mal momento, como cuando sale a cantar después de que su equipo fue goleado y también su secuestro y su liberación al estilo Superman, Spiderman o héroe del momento.
En 99 juegos con las Chivas ha marcado 29 goles, o sea, anota un gol cada tres partidos, muy poco para cómo se vende.
Ayer, ni original fue. Un brinquito antes de cobrar un penalti que fue al centro de la portería, un penalti que lo puede fallar cualquiera, pero por el momento que vive Chivas se agranda, ya que el cuadro de Tomás Boynecesita seriedad, triunfos, empates, no derrotas, ni siquiera, honrosas.
Por eso y muchas cosas más, Pulido en estos momentos, más que ayudar, es un cáncer para el Guadalajara.
ESCÁNDALOS DE ALAN PULIDO
En un programa de revista de Monterrey, salió vestido de botarga como detalle a su novia, una presentadora local, con la cual ventiló sus relaciones en diversas ocasiones.
Cambió de novia, pero no de costumbres, las redes sociales evidenciaron bailes con poca ropa y en actitudes poco apreciadas para un futbolista profesional.
Al llegar a Chivas no perdió oportunidad para publicar videos festejando o cantando en momentos apremiantes para el equipo.
Vino lo de su secuestro en su natal Tamaulipas, del cual salió ileso con una historia digna de película de Hollywood.