SAN SALVADOR, El Salvador, septiembre 2 (EL UNIVERSAL).- El autobús que transportó a la Selección Mexicana de Futbol fue agredido por aficionados al llegar al estadio Cuscatlán.
Los gritos de «Hijos de pu…» y 7-0, fueron los recibimientos al Tri que, a duras penas, llegó al lugar de descenso donde los jugadores bajaron escoltados.
Proyectiles, piedras y huevos se estrellaron en el camión que resultó con una ventana tota, hecho que la Federación Mexicana de Futbol (FMF) reportó a los encargados de seguridad.
Aficionados mexicanos también fueron agredidos, a uno de ellos le robaron su sombrero y le quisieron arrebatar una bandera.