CIUDAD DE MÉXICO, junio 30 (EL UNIVERSAL).- En la imperiosa necesidad que tiene por terminar con casi 20 años sin título, Cruz Azul ha contratado goleadores de otras ligas que cuando llegan a La Máquina pierden la puntería.
Hace seis meses, la directiva celeste anunció la llegada del ecuatoriano Ángel Mena, hombre clave en el tricampeonato del Guayaquil, con más de 14 tantos en la última temporada.
En el Clausura 2017 sí fue el máximo goleador cementero, pero con cinco tantos quedó lejos de los nueve de Raúl Ruidíaz, el campeón de goleo.
El torneo anterior arribó a La Noria Martín Cauteruccio con un cartel de matón del futbol argentino, con nueve dianas en 11 encuentros con el San Lorenzo de Almagro. Y sólo hizo un gol en la Liga MX.
Para este Apertura 2017 arribó el delantero chileno Felipe Mora.
El atacante andino realizó 13 tantos con Universidad de Chile en el más reciente campeonato. Lo malo es que llegó tocado de la rodilla.
OTROS PETARDOS. Agustín Delgado jugó para Cruz Azul en los 90 y vino con cartel de goleador, pero sólo metió dos goles en seis meses.
En 2005, Carlos Pavón anotó tres pepinos en 16 duelos. Tres años más tarde, el uruguayo Nicolás Vigneri jugó 34 cotejos y firmó cinco tantos.