El Universal
Tras el «robo» que sufrió Panamá en la semifinal de la Copa Oro ante México, los futbolistas canaleros decidieron unirse, protestaron contra la Concacaf y los llamaron «corruptos» y «ladrones».
Los panameños demostraron su descontento al final del partido y crearon una manta con tres toallas de baño, escribieron «Concacaf ladrones, ‘corruptos’, ‘corruptos’, ‘corruptos'» y se tomaron una foto en su vestidor.
Después del silbatazo final, los futbolistas panameños fueron a encarar al silbante estadounidense, Mark Geigger, quien marcó dos dudosos penales a favor del combinado azteca, ejecuciones que le dieron el pase a la final al Tri tras ganar 2-1 en tiempos extras.
El técnico de Panamá, Hernán Darío Gómez , declaró, en su conferencia de presa, «he pensado en retirarme del futbol» luego del partido ante México.
El «Bolillo» le echó la culpa al árbitro estadounidense del resultado en la semifinal y aclaró que «todos los futbolistas, mexicanos, panameños, los técnicos son gente limpia».