CIUDAD DE MÉXICO, octubre 20 (EL UNIVERSAL).- Los Pumas no pueden dejarle espacio este jueves a las sorpresas, cuando reciba al W. Connection en la última jornada de la fase de grupos, a los felinos les basta empatar para superar por diferencia de goles al líder Progreso, pero para evitar el fracaso tienen que salir a devorar a los trinitarios.
El cuadro universitario es segundo del Grupo A del certamen regional con seis unidades con tres goles a favor en la diferencia, mientras que Honduras Progreso es líder con un punto más y cero tantos de diferencia, por lo que la igualada le alcanzaría a los auriazules.
Tal es la obligación de no perder hoy, que el técnico universitario, Francisco Palencia, estaría tentado en apostar por jugadores que son habituales en la Liga MX.
En el anterior partido disputado entre ambas escuadras, Pumas superó al W Connection en Trinidad y Tobago con contundente 4-2, por lo que si la lógica impera debe ganar sin problemas, aunque las sorpresas están a la orden del día y esta noche podría llegar una.
Alfredo Saldívar, portero felino sería uno de los pocos jugadores suplentes que tendrían acción esta noche, duelo para el que se siente confiado.
“Si generamos una gran cantidad de goles podemos recibir en casa la vuelta (en cuartos de final), pero hay que jugarlo primero. El empate igual sirve pero en casa y siendo Pumas tenemos que salir a ganar”, señaló Saldívar.
Hay mucha confianza en CU, tal vez demasiada, pues “El Pollo” ya piensa en el juego contra Tigres, de la Liga MX. “Es especial jugar contra ellos. La afición lo va a tomar así. Todo mundo se va a acordar de esa final que lamentablemente nos tocó perder”.
Al respecto, Jorge Escamilla, quien espera tener minutos ante los felinos, comentó que el duelo será de revancha aunque no sea por un título de Liga.
“Hay una espina clavada que todavía tenemos. A lo mejor no es una final pero las revanchas en el futbol son muy rápidas y el domingo es una de ellas”.