Por Santiago Morales Ortiz
Xalapa, Ver.- El Club de Futbol Femenil Tiburonas Rojas cumple este año 20 años de historia, con un larga trayectoria con títulos a nivel estatal, nacional e internacional.
El 2020, ha sido un año donde claramente pudiera pensarse que no existe nada que deba conservarse en el recuerdo.
Sin embargo, hay hechos que no pueden marginarse de la mente, aún en estos tiempos de pandemia.
La historia de las auténticas Tiburonas Rojas, como tal, este dos de noviembre alcanza los 20 años.
Si, en esa fecha, solo que en el año 2000 se dio la transición de lo que era el Xalapa, Futbol Club, nacido en el primer tercio de los años 80 del siglo pasado, un puñado de chicas en un periodo de cambio, vinieron a configurar la evolución.
El antiguo plantel, tuvo logros importantes, fue la base de los campeones nacionales de 1990, 1994, dentro del llamado soccer.
En esos años se dieron también los dos títulos nacionales, únicos que Veracruz ha ganado en la disciplina de Futbol Rápido, en lo que a la categoría mayor se refiere.
Nacieron Tiburoncitas Rojas, convirtiéndose a partir de 2003, en base de muchas selecciones de Veracruz, que hasta el 2014 generaron medallas con el concurso de padres, diversos entrenadores y el aditivo de otros conjuntos, motivo por el cual a su gerencia del entonces gobernador de Veracruz, Fidel Herrera Beltrán, pasaron a ser Tiburonas Rojas, con el cual se internacionalizaron.
El futbol sala, el futbol 7, el mismo futbol rápido y por supuesto el soccer les permitieron transitar por toda la República y aun en países como Costa Rica y Colombia.
Torneos como la copa Telmex, las convirtieron en protagonistas constantes, así como de la llamada liga mayor y de la considerada liga premier, todos ellos campeonatos de corte nacional y de alto nivel.
Muchas de las jugadoras pasaron por sus filas, hoy trascienden todavía en varios planteles del futbol profesional.
Vendrán nuevos tiempos, las nuevas generaciones hoy tienen otra forma de pensar, pero aquellos grupos, de las auténticas Tiburonas Rojas, trasmiten su mística a quienes vengan a vestir sus colores.
Esto nos lleva a pensar, el filtro seguirá permitiendo una adecuada selección.
Nombrar a los técnicos, jugadoras, padres de familia, autoridades gubernamentales y el importantísimo aporte de los medios de comunicación, que en su momento han apoyado el proyecto, seguramente dejaría fuera a muchas y muchos.
Pero la memoria no podrá borrar los encuentros contra selecciones nacionales de México, de Venezuela de Belice y los triunfos de Centro y Sudamérica.
En la imaginaria, las playeras de las verdaderas escualas llevan en el hombro un moño negro en estos tiempos de luto pero con la esperanza de un futuro mejor.