Al Calor Deportivo

Sin Lionel Messi, Barcelona derrota al Inter de Milán

El Barcelona dio hoy un paso de gigante en la Liga de Campeones al vencer por 2-0 al Inter de Milán en un partido en el que los goles de Rafinha Jordi Alba más el carácter de Luis Suárez consiguieron mitigar el recuerdo del ausente Lionel Messi.

El triunfo en el Camp Nou permitió al equipo azulgrana destacarse al frente del grupo con pleno de victorias en tres encuentros. A tres puntos quedó el Inter mientras PSV Eindhoven y Tottenham apenas cuentan con uno.

 

Fue el primer partido del Barcelona sin Messi desde que el argentino se fracturara el radio de su brazo derecho en el partido del sábado ante el Sevilla.

Naturalmente, su equipo echó de menos su fantasía y mostró un juego muy plano, pero a cambio tuvo efectividad, control absoluto de las emociones y un punto más de ambición que su rival.

 

En ausencia de Messi, fue Suárez quien asumió los galones de líder. El uruguayo no marcó, pero estuvo presente durante todo el partido, fue el mejor de su equipo y suya fue la asistencia que propició el primer gol del Barcelona.

 

No estaban sucediendo demasiadas cosas cuando a los 32 minutos Suárez envió un magnífico balón hacia Rafinha, quien marcó a placer. El jugador brasileño fue la gran sorpresa de la alineación de Ernesto Valverde y respondió con un tanto. Lo vio desde el banquillo el francés Ousmane Dembélé, condenado al ostracismo.

 

El Inter propuso algo más en la segunda parte, pero apenas se registraron ocasiones de verdadero peligro. Y por si acaso, el arquero azulgrana, Marc-André Ter Stegen, envió claros mensajes de seguridad.

 

El Barcelona se dedicó a defender y practicar el arte del contraataque, y en uno de ellos Coutinho envió el balón al palo. Fue el preludio de la sentencia.

 

A los 82 minutos, Ivan Rakitic dibujó un gran pase hacia Jordi Alba, quien marcó con calidad. El lateral sigue en forma y añadiendo picante al debate sobre por qué no lo convocan para la selección española.

 

Así solventó el Barcelona un partido que sirvió para que el equipo azulgrana demostrara que sabe ganar sin Messi, aunque sin brillo, y de paso dejara virtualmente sentenciada su clasificación para los octavos de final de la Liga de Campeones. Y muy probablemente como primero de grupo.