Tres finales del mundo y un cuarto lugar a nivel Sub-17 habla de que la Federación Mexicana de Futbol se encuentra haciendo algo bien en esa categoría.
Para refrendar esta hipótesis, Raúl Gutiérrez, técnico campeón del mundo en 2011, da estos puntos que bien pueden tomarse como el secreto para que a nivel Sub-17, los resultados sean los deseados a todos los niveles.
“Estas categorías”, opina el Potro, que como jugador fue campeón con el Atlante en la temporada 1992-92, “la verdad, [los jugadores] no son tan seguidos para el futbol profesional, así que puedes pedir a los que quieras y trabajar con ellos el tiempo que sea necesario sin preocuparte por otra cosa. Es algo que no sucede ni en la Sub-20”.
Pero hay más que eso: “Hay gran fogueo nacional e internacional, giras por todos lados en el mundo. Con el tiempo que hay para trabajar, los resultados son la consecuencia de los partidos que se han tenido para la preparación integral”.
Y finalmente está algo no menos importante: “Los técnicos están preparados y bien pagados. Hay capacitación constante. El Chima Marco Antonio Ruiz es el eslabón final de un proceso exitoso que va de 2009 a 2016”. Así, Gutiérrez espera ver triunfar a estos chicos, igual que pasó con los suyos.