En cuanto se enteró de que Jamaica ya le ganaba 4-0 a Haití en el estadio BBVA, Mónica Vergara recuperó parte de ese ímpetu perdido tras las derrotas ante esos equipos caribeños. No era para menos. De pronto, su equipo necesitaba sólo de un gol para clasificar al anhelado repechaje mundialista.
El problema era ese, que la Selección Mexicana Femenil extravió la portería adversaria en el momento más inoportuno. Lo que explicó la desolación colectiva tras el gol marcado por Kristie Mewis (90’). De nada sirvió el gran ambiente en el estadio Universitario y ofrecer resistencia ante las actuales bicampeonas del mundo.
Al final, Estados Unidos halló la forma de enmudecer al Volcán y llevarse su tercer triunfo en la fase grupal del Concacaf W (1-0). El desastre del Tricolor Femenil se completó con una nueva derrota ante el acérrimo rival.
Ya son 18 de forma consecutiva, para ejemplificar a la perfección la diferencia entre un futbol y otro. Vergara siempre supo que se trataba de un mero trámite, más allá de la ilusión otorgada por las jamaicanas, ya que su equipo ni siquiera fue capaz de eso durante el certamen. Triste final