Hay extranjeros que llegan al futbol mexicano a dejar huella, y otros que sólo lástima. Aquí algunos ejemplos recientes de foráneos que vinieron a quitarle el lugar a un jugador mexicano, se fueron bien pagados y ahora siguen de intrascendentes.
Alemao
El güerito brasileño que se llamaba José Carlos Toffolo pero le gustaba que le dijeran Alemao, jugó en 2015 para Cruz Azul. Muy «cremoso» pero poco efectivo. Ahora juega en la segunda división de su país para el Sportivo Alagoano.
Maranhao
Extremo zurdo del que Enrique Meza dijo, «va a triunfar en México…», y no, no triunfó. Estuvo un año en Cruz Azul para después irse a Corea del Sur, u diferentes clubes de Brasil como el Chapecoense. Acaba de ser contratado por el Fluminense.
Ravel Morrison
El volante inglés llegó al Atlas con la fama de que había jugado en el Manchester United de la Liga Premier inglesa y la Lazio de la Serie A de Italia. Con los Rojinegros sólo vino a pasear y ahora está registrado en el futbol de Suecia con el Ostersunds.
Robin Ramírez
Cuando Robin llegó a México para jugar en Pumas lo vendieron como el nuevo «Cardozo», después de la blasfemia se fue, con dos goles marcador en un año y después de naufragar por clubes de Colombia y Argentina, ahora juega en el River Plate de su país.
Timothée Kolodziejczak
El central francés que jugó en Tigres cinco partidos, regresó a su país y está cedido al Saint-Etienne.