Hay una razón extra a lo futbolístico, por la que la Selección Nacional jugará sí o sí el próximo miércoles en el Estadio Azteca: la presión de los patrocinadores.
Al conocerse la cancelación del encuentro amistoso contra Costa Rica, todos los socios comerciales de la Federación Mexicana de Futbol se comunicaron con los altos mandos del balompié nacional para recordarles que ya se había hecho la inversión para las pautas publicitarias en ese juego —primero del Tricolor en 10 meses—, por lo que la petición fue cerrar a otro adversario lo antes posible y que se dieran garantías de que el capital que se ha puesto para ese cotejo no se perderá