El Universal
GDANSK, Polonia, noviembre 13 (EL UNIVERSAL).- Frío, poco vistoso y sin el brillo vivido en el partido contra Bélgica, pero la Selección Mexicana derrotó 0-1 a Polonia para cerrar así el 2017, en espera de más de este tipo de partidos en la preparación para el Mundial de Rusia 2018.
Con seis cambios en la alineación respecto a lo que presentó ante los belgas, Juan Carlos Osorio mando a la cancha la anunciada línea de tres defensores, con Raúl Jiménez y Javier Aquino como sorpresa al ataque, cuando se esperaba que Oribe Peralta fuera de inicio.
Pero si algo tiene Jiménez es gol, y eso quedo de manifiesto nuevamente en este partido, cuando marcó, al minuto 13, el único tanto de este partido a pesar de los pocos minutos que tuvo en la cancha ante una selección polaca, que quedó lejos de las expectativas, lo que fue aprovechado por los mexicanos.
Después vinieron las modificaciones propias de este tipo de encuentros, sin que México dejara al rival generar real peligro y con menos errores de los que cometieron ante los belgas. Así, la gira por Europa terminó con saldo positivo: empate y victoria, que deben tomarse con la justa medida en espera de tener más partidos como estos en los meses que quedan antes del Mundial.