Contundencia, esa palabra seguro ronda en la cabeza de Gerardo Martino porque su selección sigue sin encontrar fácil el gol.
La tarde del domingo fue con sabor amargo porque se sumó, pero sólo un punto en casa tras el 0-0 final.
La Selección Mexicana, con presión porque el Mundial está cerca y la calificación aún no, recibió a Costa Rica en un vacío Estadio Azteca, en el que se realizó la prueba para el acceso controlado de aficionados (cerca de dos mil que fueron invitados).
Ya en la cancha, apenas unos minutos tardó Hirving Lozano en rematar de cabeza y generar la primera de peligro para la Selección Mexicana, pero no pasó a más.
Lozano tuvo al menos tres en el arranque, de esas, en dos recibió falta, aunque cierto que no hubo gol.
Martino desde la banca, de pie, observaba y analizaba qué hacer para encontrar ese gol que tanto le ha costado a su equipo en la eliminatoria.
Costa Rica tardó 10 minutos en poder generar la primera de peligro, que terminó fuera del campo pero que pasó muy cerca del poste izquierdo de Memo Ochoa.
Héctor Herrera incluso tuvo una de tiro libre, pero el balón se negó a entrar a la red defendida por Keylor Navas.
A los 31′ Rogelio Funes Mori encontró espacio, remató dentro del área chica, la esférica cruzo la línea de gol, pero el abanderado ya tenía su banderín arriba, fuera de lugar que le impedía a México tomar la ventaja.
Ya para el complemento, el ‘Tata’ mandó a Luis Romo en lugar de Edson Álvarez y también metió a Orbelín Pineda (que ya milita en Europa con el Celta de Vigo español) en sustitución de Carlos Rodríguez.
El partido después de 50 minutos era una calca del primer tiempo, México llegaba, en otras sólo se acercaba, pero no concretaba. Y en la visita era lo mismo, alguna que otra de peligro que Ochoa atrás tapaba para mantener el 0-0.
Al final, el Tricolor se mantiene en el tercer puesto de la eliminatoria de Concacaf, por detrás de Canadá (líder con 22 puntos) y Estados Unidos que se quedó con 18 unidades.