Julio César Chávez Junior dio una decepcionante actuación en Arizona, al perder por nocaut técnico en el quinto round ante el estadounidense Daniel Jacobs, quien tuvo un estreno exitoso en el quinto episodio.
Chávez Jr. tomó la iniciativa de la pelea, tratando de ir al frente con algunas combinaciones de golpes que no encontraron a Jacobs, aunque sí logró conectarle un recto que hizo para atrás al estadounidense, quien venía prácticamente de un año sin pelear.
El mexicano comenzó dominando el combate, más por su iniciativa de ir hacia el frente que por el daño que le causó al norteamericano, quien no se mostraba cómodo en el ring. Pero eso duró poco, porque en el tercer episodio el estadounidense al fin soltó sus golpes. Conectó un upper que lastimó a Chávez Jr. en el hígado, luego lo conectó con un recto y otro upper para comenzar a emparejar el combate.
El Hijo de la Leyenda poco a poco comenzó a perder el buen momento con el que comenzó la pelea. Se olvidó de los jabs y tiró pocas combinaciones de golpes y eso lo aprovechó Jacobs, quien lo comenzó a castigar en el terreno corto con uppers. La pelea era pareja todavía, pero el estadounidense poco a poco se adueñaba de ella.
El mexicano mantuvo la tendencia de sus últimos combates, en el que comenzaba a cansarse conforme el pleito se hacía añejo y se olvidaba de lanzar el jab.
Intempestivamente, cuando terminó el quinto episodio, la esquina de Chávez Jr. decidió que no saliera más a pelear. El castigo en el estómago para el mexicano fue suficiente para que ya no saliera para el sexto round y le permitió a Jacobs ganar en su estreno en las 168 libras por nocaut técnico.
El resultado fue decepcionante para el público en Phoenix, que lanzó cerveza y objetos al ring, en señal de molestia por el desempeño de Chávez Jr., quien tuvo que ser retirado y protegido por parte de su esquina en otra decepcionante exhibición.