MONTERREY, NL., diciembre 10 (EL UNIVERSAL).- Julio César Chávez Jr. (50-2-1, 32 KO) está de regreso. “El Hijo de la Leyenda” rompió 17 meses de inactividad con una victoria contundente sobre el alemán Dominik Britsch (32-3-1, 11 KO) por decisión unánime en pelea pactada en peso supermedio, a diez rounds, en la Arena Monterrey.
Su triunfo número 50 vino con una pelea en donde mostró una mejoría absoluta respecto a sus últimas presentaciones. Se mostró fuerte, con técnica y sólo le faltó cerrar con un nocaut para tener una noche perfecta. Sin embargo, Britsch tuvo la virtud de absorber una gran cantidad de castigo y terminar el combate de pie.
El primer round fue de estudio, de buscar amoldar los estilos. Chávez Jr. y Britsch en varias ocasiones terminaron en amarres, pero con la decisión de dar dos pasos para adelante por uno que deban para atrás. El mexicano intentaba abrir con la mano derecha. El público de inmediato se conectó con gritos de “Chávez, Chávez”.
Para el segundo giro, “El Hijo de la Leyenda” encontró mejores combinaciones de golpes por arriba y hasta en dos ocasiones mantuvo al alemán sobre las cuerdas. Britsch demandaba más castigo en un alarde de fortaleza, pero su rostro comenzaba a enrojecer.
Julio mostró recursos en el tercer round. Empezó con certeros ganchos, y cuando Dominik esperaba los mismos castigos, varió con golpes al rostro bien conectados. Pero también Chávez se llevó un severo obús al mentón en un descuido de su guardia, en una pelea que se tornaba de toma y daca.
En el quinto round, el europeo apostó al boxeo de reversa y buscando el contragolpe. Esto frenó el ímpetu del sinaloense, que también le bajó la revolución a sus lances. Incluso, también cambió su forma de atacar buscando golpes de poder y más certeros, con pocos lanzamientos.
Al siguiente giro, fue Chávez el que lo cerró con un misil sobre el mentón de su rival que lo tambaleó. Sus entrenadores le pidieron que tuviera cuidado con su guardia alta, una vez que por proteger su zona blanda, se estaba llevando castigo importante del mexicano.
“El Hijo de la Leyenda” conectó un jab al gancho con bastante dinamita en el séptimo. Dominik parecía haberlo absorbido por completo, pero al querer dar uno pasos laterales, el castigo tuvo su efecto retardado y poco estuvo de visitar la lona. Sin embargo, el sinaloense también ya mostraba cansancio para ir por su presa.
En el noveno episodio, de nueva cuenta Chávez Jr. estuvo a punto de terminar el combate con un nocaut. No obstante su adversario siguió absorbiendo todo el castigo, resistiendo hasta el último cuerazo en una apuesta muy en el límite de su resistencia. Incluso, provocando muestras cansancio en el ex campeón de peso medio.
El cierre del combate estuvo marcado por un Junior buscando el nocaut que nunca llegó. Le faltó un extra de estamina para cerrar un buen combate luego de 17 meses de inactividad. Los jueces sentenciaron lecturas similares de 99-91 para otorgarle el triunfo por decisión unánime, ante el regocijo del público regiomontano que reconoció el esfuerzo de Chávez Jr., que parece estar de regreso, con nuevo bríos, y con argumentos para pensar que puede regresar a los primeros planos del boxeo mundial.