Recuperar la confianza de la afición de Veracruz hacia un proyecto de beisbol profesional, es el objetivo de El Águila de Veracruz, que luego de tres años de ausencia, volverá a la Liga Mexicana de Beisbol, en busca del séptimo campeonato en la historia de la franquicia.
Fernando Magro, director general de la novena porteña, aceptó que el reto más importante es generar una base sólida para que sea un proyecto que perdure e impacte en el estado.
Su intención es firmar un acuerdo para tener el comodato de la unidad deportiva que incluye el estadio Beto Ávila, al menos por 10 años:
“La gente tiene miedo de creer en un proyecto deportivo en Veracruz, ha quedado muy golpeada por la forma en que han salido los equipos de cualquier deporte, que en su momento fueron un boom, y hoy no existe un espectáculo de alto rendimiento de primer nivel”.
El primer paso fue recoger las inquietudes de la afición, y entre ellas, encontraron que el estadio estaba olvidado, por lo que la remodelación es el eje sobre el que se cimienta el proyecto (inversión de más de 70 millones de pesos), para recuperar a su afición y crear nueva.