Miguel Layún explotó contra la prensa en el estadio Chivas tras el empate a dos goles entre Guadalajara y Porto.
El defensa mexicano que milita en el equipo portugués pasó por la zona de prensa sin hablar ante los medios, únicamente saludando y sonriendo. Dicha acción molestó a los reporteros que comenzaron a gritar y pedirle que se parara unos minutos.
Layún continuó su camino y en ese momento se escuchó un chiflido que lo hizo enojar; el jugador de los dragones se detuvo y respondió: “Qué bonito hermano, después se quejan cuando uno los manda a la chingada”.