CIUDAD DE MÉXICO, julio 21 (EL UNIVERSAL).- Las Raiderettes acompañan a los Raiders de Oakland cada domingo que hay partido en el Oakland Coliseum.
Animar a los aficionados y al equipo es su trabajo de medio tiempo. En la semana, las porristas mantienen una vida nada fuera de lo común.
Por ejemplo, Amanda, quien está en su tercer año en la institución, es una maestra de cuarto grado en una escuela privada. En las mañanas imparte clase y durante las tardes entrena con sus compañeras.
En el caso de Kelsi, ella trabaja en una empresa encargada de vender equipos médicos. «Comienzo a las 5 de la mañana y mi labor consiste en hablar con clientes hasta el mediodía», continúa. «Nuestros trabajos nos permiten ordenar la agenda para poder estar con el equipo. Amamos a los Raiders».
Courtney, quien es hija de mexicana, trabaja en una empresa de software instalada en Oakland.