El Universal
Ayer en Foxborough, Najee Goode anotó en una patada bloqueada, Darren Sproles regresó un despeje 83 yardas y Malcolm Jenkins se llevó una intercepción 99 yardas para otro touchdown de Eagles, que dieron la sorpresa de la campaña al vencer 35-28 a los Patriots.
Para el equipo de Bill Belichick fueron las dos primeras derrotas en fila en campaña regular desde 2012.
Este tropezón le cambia completamente la cara a la Conferencia Americana.
Cincinnati (10-2) es ahora el primer sembrado en la AFC; Denver (10-2) es segundo y los Patriots (10-2), terceros.
De mantenerse el triple empate, el primer lugar de la siembra se disputará en la Semana 16, cuando los Broncos reciban a Bengals, en un Monday Night Football en el que Cincinnati podría exorcizar sus demonios.
Andy Dalton tiene récord de 4-7 como titular de los Bengals en partidos jugados en horario “prime time”.
Cincinnati tiene marca de 8-1 contra rivales de la AFC, mientras los Broncos están 6-2.
Los Patriots no controlan su destino y parece complicado que esta campaña tengan semana de descanso en la ronda de Wild Card.
Sin Rob Gronkowski ni receptores confiables o disponibles al 100%, Brady terminó con su peor rating de la campaña (71.4). Su mejor hombre en el ataque aéreo fue el corredor James White, quien atrapó 10 pases, con 115 yardas y un touchdown.
Sin contar a Danny Amendola (7 recepciones, 62 yardas y un touchdown), sus receptores fueron Scott Chandler, Brandon LaFell, Keyshawn Martin y Brandon Bolden.
Además de las lesiones de “Gronk”, Julian Edelman y el corredor Dion James, los Patriots jugaron con una golpeada línea ofensiva que fue incapaz de proteger a Brady, capturado en cuatro ocasiones y golpeado otras 13 veces.
“Quisieras tener a todos sanos. Todos los equipos lo quisieran, pero no es la realidad”, dijo Brady. “Tienes que encontrar maneras de ajustar. Hicimos muchas cosas bien. Pienso que hubo ciertos errores críticos. Sólo una tarde decepcionante, pero tenemos que encontrar la manera de ganar la siguiente semana”.
Sí, el campeón está contra las cuerdas, pero que nadie se atreva a darlo por muerto. Belichick trabajará con su staff y hará los ajustes necesarios para ganar con lo que tiene (que es poco).
Por lo pronto, prepárense para esta repetitiva y robótica respuesta: “We’re on Houston”.
“Obviamente no lo hicimos bien hoy”, dijo Belichick. “No hicimos lo suficiente en la ofensiva, entregamos el balón, aceptamos dos touchdowns en tercer down, no jugamos bien en equipos especiales, simplemente no hicimos lo necesario para ganar. Competimos y tuvimos oportunidad de regresar al final, pero cuando permites 21 puntos cuando tu defensa no está en el campo, pierdes 98 por ciento de esos juegos. Tenemos que regresar a trabajar y hacer un mejor trabajo”.
Y lo harán.
Ahí vienen los Steelers
Después de la dolorosa derrota en Seattle, Ben Roethlisberger y los Steelers demostraron anoche que aún pueden ser un factor en los Playoffs.
El “Big Ben” pasó para 364 yardas y cuatro touchdowns en el triunfo de Pittsburgh, 45-10 sobre Indianapolis.
Una vez más Antonio Brown estuvo en plan intratable, al atrapar ocho pases, con 118 yardas y dos anotaciones. Ah, y también se llevó una patada de despeje 71 yardas hasta las diagonales.
Los Steelers mejoraron a 7-5 y están nuevamente en la plática de la postemporada. Si la campaña terminara hoy, los Jets (7-5) irían a Playoffs y no Pittsburgh, debido al récord dentro de la AFC.
La carrera por los dos boletos como Wild Card va a ser de final de fotografía, con Colts (6-6), Kansas City (7-5), Jets, Buffalo (6-6) y Houston (6-6).
Por momentos, el ataque de los Steelers parece imparable y esa puede ser la diferencia.
Anoche, por ejemplo, Martavis Bryant atrapó cuatro pases para 114 yardas y un touchdown, mientras DeAngelo Williams se destapó con 134 yardas por tierra.
Vienen dos semanas durísimas para Pittsburgh: primero visitan Cincinnati (9-2) y luego reciben a Denver.
Los Steelers cierra la temporada regular con juegos en Baltimore (4-8) y en Cleveland (2-10).
Cuidado con los Seahawks
Carolina (12-0) y Arizona (10-2) son, sin discusión, los dos mejores equipos de la NFC en este momento.
Panthers sufrió para vencer a los Saints en un típico duelo divisional que parecía podía ganar cualquiera, pero Cam Newton lanzó su quinto pase de touchdown de la tarde con 1:05 en el reloj, una espiral de 15 yardas a manos de Jerricho Cotchery para sellar el triunfo de Carolina, campeón de la División Sur por segundo año en fila.
En el triunfo en New Orleans, el ala cerrada Greg Olsen atrapó nueve pases para 129 yardas y sigue con esa impresionante campaña que lo debe mandar al Pro Bowl.
Arizona tuvo la ayuda de un novato para mantenerse en la cima como la mejor ofensiva de la NFL.
David Johnson corrió para 99 yardas y también atrapó un pase de touchdown en su primer juego como titular, en el dominante triunfo de los Cardinals sobre St. Louis.
El ataque de Arizona, comandado por Carson Palmer, sumó 524 yardas en su sexto triunfo consecutivo.
Con el “Milagro de Motown” del jueves, los Packers (8-4) se mantienen como líderes en el Norte de la NFC, y mientras Aaron Rodgers esté sano, Green Bay debe ser considerado como contendiente.
Pero son los Seahawks los que ya comenzaron a jugar al nivel que debe preocupar al resto de la Conferencia.
Seattle dominó y aplastó 38-7 a los Vikings en Minnesota. Los Seahawks, que en algún momento parecían no tener salvación con aquel récord de 2-4, han ganado tres en fila y están listos para el tramo final del calendario regular.
Adrian Peterson, líder corredor de la liga, sólo pudo sumar 18 yardas por tierra, mientras Russell Wilson completó 21 de 27 para 274 yardas y tres touchdowns; Wilson también corrió para 51 yardas y otra anotación. Doug Baldwin atrapó cinco pases para 94 yardas y un par de touchdowns, y el novato Thomas Rawls terminó el día con 101 yardas por tierra y una visita a las diagonales.
Seattle totalizó 433 yardas. Minnesota, 125.
Los Vikings han perdido contra Packers y Seahawks, dos equipos que seguramente estarán en la postemporada, con marcador combinado de 68-20.
Mucho cuidado con los Seahawks. No sé si llamarlos “Caballo Negro”, pero sí sé que serán un dolor en… las muelas en cuanto comiencen los Playoffs.
Dallas no está muerto
Los Cowboys (3-8) visitan Washington (5-6) esta noche, y si Dallas gana, entonces estará a un solo triunfo del primer lugar de la peor División de la NFL.
Claro, primero tienen que vencer a los Redskins y después viene una visita a Green Bay (donde terminó su temporada 2014 a principios de año); luego, dos rivales del Este de la AFC, Jets y en Buffalo, para cerrar en casa ante Washington, el 3 de enero.
Los Redskins tienen el calendario más “fácil” para cerrar la campaña: en Chicago (5-7), Buffalo (6-6), en Philadelphia (5-7) y en Dallas (3-8).
Pero en esa División todo puede pasar. Así que no descarten a los Cowboys… todavía.