El Universal
Aunque México no alcanzó la meta de obtener cinco plazas olímpicas, 2015 fue muy un año muy productivo para el taekwondo nacional. Al menos, así lo consideró el director de selecciones nacionales Arturo Farías.
“Se consiguieron muchos de los objetivos planteados al inicio de la temporada. Es importante destacar que además de los boletos a Río, el crecimiento que han tenido muchos de nuestros seleccionados juveniles fue muy bueno”, dijo el entrenador.
Farías comentó que atletas como Paulina Armería y Victoria Heredia son cartas fuertes para el próximo ciclo luego de obtener plata en los Juegos Panamericanos de Toronto de manera inesperada.
“ Es un logro bastante importante para ellas porque son muy jóvenes. Sin duda en los próximos años van a ser la apuesta de la federación debido a subien desempeño a nivel internacional. Son dos talentos y debemos darles un seguimiento preciso para que mantengan el ritmo ascendente”.
Los primeros meses de 2016 serán claves para la especialidad pues se definirá a los taekwondoínes que participarán en Río.
“Hay mucha competencia interna, especialmente en categorías como los 58 kilogramos varonil. Los muchachos deben mantenerse en un muy buen nivel para poder aspirar a ponerle su nombre a las plazas”.
Farías auguró una buena participación nacional en los Olímpicos aunque para ello se deberá mantener el ritmo exigente de entrenamientos y elegir de manera inteligente las competencias.
“Hay que planear un calendario que le dé continuidad al trabajo realizado en 2015. Hay cosas que se hicieron bien y otras que se deben mejorar. Tenemos tiempo para que quienes vayan a Brasil estén en la posibilidad de subir al podio”.
La primera competencia de los seleccionados será en el Abierto de Canadá en febrero.