El Universal
El tan ansiado retorno del mariscal de campo Tony Romo tuvo un final feliz, pues Cowboys de Dallas (3-7) superó 24-14 a Dolphins de Miami (4-6) y cortó una racha de siete descalabros consecutivos en la temporada 2015 de la NFL.
El equipo de la “Estrella solitaria” se metió al Sun Life Stadium con motivo de la undécima semana de acción y obtuvo una victoria de oro, pues si bien continúa en el sótano de la División Este de la Conferencia Nacional (NFC), el sector es tan flojo que aún tienen vida en el campeonato.
Tras fracturarse la clavícula en la segunda fecha de esta campaña, Antonio Ramiro Romo reapareció en los controles “azul y plata”, logró dos envíos de touchdowns, completó 18 pases en 28 ensayos, cosechó 227 yardas y evidenció su falta de juego con un par de intercepciones, que para su suerte no pesaron.
En el segundo episodio cometió su primer error, justo cuando tenía a su ofensiva en zona roja; pero el destino estaba decidido a sonreírle, pues cuando sus rivales se disponían a emprender el ataque, el apoyador Rolando McClain les arruinó los planes, les robó el balón y se los devolvió 12 yardas hasta las diagonales.
Dicha jugada puso el 7-0 para la visita y le brindó tranquilidad a Romo en sus siguientes apariciones sobre el emparrillado, hasta que un minuto antes del medio tiempo, se destapó con su primer touchdown, en alianza con el receptor Terrance Williams (31 yd), para el 14-0.
Pero los “cetáceos” querían ponerle número a la casa antes del descanso y así lo consiguieron por conducto de su pasador Ryan Tannehill, quien localizó al ala cerrada Jordan Cameron (12) para acercarse 7-14.
Entre descuidos defensivos y varias infracciones, los “boys” permitieron que en la recta final del tercer episodio, Miami empatara 14-14 y crispara los nervios de los tan maltratados aficionados de Dallas.
Fue en el amanecer del cuarto capítulo cuando los seguidores de Vaqueros y su millonario dueño Jerry Jones tuvieron un glorioso “déjà vu”, pues Romo soltó el brazo 16 yardas para su receptor Dez Bryant, uno de sus blancos predilectos en los últimos tiempos.
Precisamente, Bryant tuvo un premio extra esta tarde, pues logró la recepción 400 de su trayectoria y pasó a la historia de la franquicia como el más rápido en conseguir dicha marca (80 partidos); de este modo, es el sexto del club con esta cantidad tras Tony Hill, Emmitt Smith, Drew Pearson, Michael Irvin y Jason Witten.
Para certificar la victoria, el pateador Dan Bailey canjeó una patada “de trámite” de 30 yardas y así se estableció el 24-14 final, a dos meses y dos días de la última vez que Dallas salió con el puño en alto.