El Universal
Cuando en 1996 Bernardette Pujals decidió dejar de representar a España y competir por nuestro país, lo hizo consciente de que las críticas serían inevitables
Aún así, la amazona decidió arriesgarse, contraer matrimonio con un mexicano, formar una familia y portar la bandera tricolor en la especialidad de equitación. De aquello han pasado ya 20 años.
“Claro que recibí muchas críticas pero creo que fueron más producto de la ignorancia. Dicen que el ave es del cielo donde vuela, no del nido donde nació”, dijo la seleccionada, quien es la única de su disciplina con boleto para los Juegos Olímpicos de Río.
De expresivos ojos azules, Bernardette reflexiona, se toma un respiro y concluye que competir por nuestro país fue la decisión correcta
“México me ha dado muchas oportunidades por lo que estoy enormemente agradecida. No fue una decisión fácil de tomar; durante años llevé la bandera catalana en el reverso de mi traje, cerca del corazón ahora ya no lo necesito, la insignia española y mexicana están en mi corazón”, agregó Pujals, quien es experta en adiestramiento
Tres décadas dedicadas a los caballos, han dejado innumerables satisfacciones a Pujals.
“La equitación me ha hecho más fuerte cada vez que he tenido que superar un fracaso, más vulnerable cada vez que he perdido a un caballo, más tolerante cuando enseño, más compasiva cuando veo mis limitaciones, aprendo mucho tanto del deporte como de los caballos y de mis alumnos en todos los aspectos de mi vida”
¿Cómo describe el vínculo entre el corcel y el jinete?
“Es una comunicación perfecta en un nivel muy profundo, en el lenguaje del silencio. Con la práctica del adiestramiento existe la ilusión de que vas a dominarlo, de que vas a hacerlo bien y sigues practicando y entrenando sintiendo que casi lo logras, buscas la perfección. Cuanto más profundizas te das cuenta de todo lo que te falta conocer, pasan tres décadas y sigues aprendiendo”.
Bernardette, quien también se dedica a entrenar a jinetes desde los 17 hasta los 60 años, elige con mucho cuidado a sus compañero de competencias
“Lo más importante es que tenga una buena cabeza, que sea comunicativo y centrado. Debe tener buen corazón, voluntad para trabajar y deseo de esforzarse por complacer al jinete, buenos movimientos y un buen equilibrio entre flexibilidad y fuerza”.
Aunque ya tiene su boleto a los Juegos Olímpicos de Río, Pujals, quien suma dos décadas como representante nacional, aún no está segura de su participación.
Será en junio próximo cuando su entrenadora y su equipo de trabajo decidan si acude o no.
De confirmarse, sería la más veterana de la delegación con 47 años.
“Depende de que ‘Heslegaards Rolex’ (con el que entrena desde 2010) y yo podamos hacer tablas sin fallos para valorar entre federativos, propietarios del caballo y patrocinadores nuestra realidad y tomar la decisión con conciencia”, afirmó.
A diferencia de Londres 2012 cuando compitieron cuatro jinetes, la equitación mexicana estará representada, en caso de confirmarlo, solamente por Pujals. “Ya no tenemos ninguna oportunidad de que algún jinete califique ni en el concurso completo ni en adiestramiento, ya terminaron las competencias que daban plazas”, dijo Juan Manuel Cossio, presidente de la Federación de Equitación.
Pujals ve lejos conseguiruna medalla olímpica. En su especialidad, comentó, sólo hay un jinete junior con buen pronóstico.
“En Mexico el adiestramiento esta poco desarrollado, necesitamos mejores concursos, más patrocinadores y mayores posibilidades de competir en el extranjero, el costo es demasiado alto porque debes viajar con el caballo. Necesitamos trabajar todos unidos por Mexico sin tanto protagonismo individual, si lo hacemos lograremos mucho más”
A finales de este meses la amazona competirá en Alemania.
“Si quieres llegar rápido camina solo pero si quieres llegar lejos camina acompañado. Necesitamos más jinetes que quieran llegar lejos porque con esa actitud aseguro que hay éxito para todos”, concluyó