Hay algunos daños colaterales por la presencia en México de Roger Federer, quien mañana jugará un partido de exhibición ante Alexander Zverev en la Plaza de Toros México.
Uno importante tiene que ver con los ejemplares que se lidiarán el domingo, en la cuarta corrida de la temporada grande.
Por reglamento, los astados están en los toriles del inmueble desde hace unos días, pero lo normal es que haya tranquilidad los días previos al festejo, lo que no sucederá por el partido de tenis.
Así es que la administración ha tapado el sitio donde están los toros con diversas lonas para que no se inquieten y lleguen tranquilos a la corrida