La temporada más reciente que los Patriots de Nueva Inglaterra perdieron al menos cinco partidos, fue la 2009, cuando terminaron con una marca de 10-6 y fueron eliminados en el duelo de comodín por los Ravens de Baltimore.
Si hay dos grupos de seguidores de la NFL que seguramente se encuentran con una sonrisa en sus rostros en estos momentos, son los fanáticos de los Steelers de Pittsburgh y los millones de aficionados que odian a los Patriots.
Nueva Inglaterra perdió por segunda vez en la temporada dos juegos al hilo, y se quedaron sin posibilidades de descansar el fin de semana del wild card por primera vez desde, sí, adivinaron, 2009.
Steelers (8-5-1) manejó la presión que le impuso horas antes Baltimore (8-6), que venció 20-12 a Tampa Bay. En el Heinz Field, la franquicia de Pittsburgh consiguió una victoria de oro 17-10, cortaron una seguidilla de cinco reveses ante la dupla Tom Brady y Belichick, y así, se mantienen en la cima de la AFC Norte a dos fechas de concluir la campaña.
En el Lucas Oil Stadium, los Colts de Indianapolis frenaron a los Cowboys de Dallas (23-0), quienes recibieron un golpe de realidad para lo que serán los Playoffs.
Dallas vio interrumpidas sus cinco victorias al hilo y no cumplió con la tarea de este fin de semana: ganar la división Este. La victoria de Washington, 16-13 a Jacksonville, retrasará la coronación de la Estrella Solitaria hasta la próxima semana.
Las Águilas de Filadelfia (7-7), campeonas del Super Bowl 52, dieron la sorpresa de la Semana 15 después de vencer a domicilio 30-23 a los Rams de Los Ángeles para mantener latentes sus posibilidades de refrendar su título.
Rams (11-3), recibió su primer descalabro en el Memorial Coliseum en siete juegos, y perderá la primera posición de la NFC en caso de que Saints derrote hoy a Panthers en Carolina del Norte.