El Universal
Aaron Rodgers fue paciente y esperó hasta el último segundo del partido para mandar el pase de touchdown que enterró a los Lions de Detroit.
Rodgers envió un arcoiris de 61 yardas que atrapó en las diagonales el ala cerrada Richard Rodgers, ya sin tiempo en el reloj, para la victoria de Packers, 27-23.
Pero el final se derivó de una jugada polémica, en la que los réferis marcaron un castigo en contra de Devon Taylor por sujetar a Aaron de la máscara en lo que tuvo que ser la última jugada del encuentro.
Green Bay tenía cuatro derrotas en sus últimos cinco duelos, mientras que Detroit ligó tres victorias. Sim embargo, con el descalabro de ayer perdió la oportunidad de barrer a los Packers desde 1991.
Matthew Stafford encontró las manos de Calvin Johnson en la zona de anotación para poner el marcador 17-0 y más tarde el pateador Matt Prater lo puso 20-0.
Pero los Packers vinieron de atrás. Rodgers anotó en una carrera de 17 yardas con 3:04 minutos en el cronómetro que puso a su equipo a tan sólo dos puntos de desventaja frente a los Lions.
Stafford conectó con T.J. Jones para hacer efectiva una tercera oportunidad y 12 yardas desde la 18 de su propio territorio y luego Green Bay solicitó su último tiempo fuera con 2:54 minutos por jugarse. Los Lions requerían sólo un primero y diez para sellar la victoria, pero la defensiva de los Packers se fajó y obligó a Detroit a despejar. El ovoide terminó en la yarda 21 de Green Bay y con 23 segundos.
Llegaron dos pases incompletos, uno de ellos pareció interferencia de pase por parte de Detroit. Aaron Rodgers lanzó un envío a James Jones, luego vinieron una serie de pases laterales hasta que el balón regresó a las manos de Rodgers, quien ya no tuvo opción para mantener la jugada viva.
Taylor derribó al quarterback de los Packers, pero se marcó “sujetando la máscara” y Green Bay tuvo una oportunidad más, que no desperdició. Rodgers se quitó a un par de defensivos y luego mandó el bombazo a las diagonales para el triunfo cardiaco.