En el ciclo olímpico de París 2024 Osmar Olvera se volvió un atleta a seguir, gracias a sus múltiples medallas obtenidas; pese a ello, el clavadista mexicano advierte que lo mejor está por venir.
“Me emociona saber que ahora estoy en un gran momento, pero también sé que todavía no estoy en mi pico de rendimiento, mi mejor momento aún no llega, eso va a ser cuando tenga 24 o 25 años, entonces eso me emociona aún más”, afirmó el subcampeón mundial.
Acepta que hoy, a sus 20 años, ya construyó un andar destacado, pero “sé que todavía me queda mucho camino por recorrer. Ahorita estoy disfrutando cada éxito, cada competencia y estoy contento con todo lo que está pasando”.
Osmar está satisfecho por vivir esta situación, ya que luego de Tokio 2020 se planteó tener un proceso en el que su carrera fuera en ascenso y París 2024 es la cita para “cerrarlo con un gran resultado”.
En estos tres años, Olvera Ibarra aseguró que “creció” en cuanto a fogueo internacional, “ya tengo experiencia de Mundiales, Juegos Panamericanos y los jueces ya conocen que he ganado medallas. Llego con confianza y renombre”.
El clavadista señaló que la clave para lograr estos objetivos es disfrutar el día a día. “Cuando disfruto las competencias es cuando mejor salen las cosas. Realmente disfruto cada cosa de mi rutina diaria, sin pensar en lo que pasará”, compartió.
En los certámenes de World Aquatics, Osmar obtuvo nueve medallas (1 oro, 6 platas y 2 bronces), lo que lo volvió un referente en el trampolín de 3 metros y al recibir dichas preseas sintió nostalgia: “Recuerdo los momentos difíciles que pasé, todo lo que tuve que dejar para cumplir mi sueño, pero me pone contento lo que estoy logrando”.
Olvera Ibarra no oculta su emoción por volver a competir en una justa veraniega: “Siento que van a ser mis primeros Olímpicos, porque serán con público, mis papás van a estar ahí. Va a ser muy padre”.