Nostalgia, será recordar el guitarrazo que el temible Cien Caras aplicó sobre el Rayo de Jalisco Jr. para arrancar la batalla en la que el destino cobró con su máscara las afrentas hechas al heredero de Max Linares, en la legendaria arena México.
Don Carmelo y sus muchachos, los famosos hermanos Dinamita se encapucharán de nuevo para echarle montón a su paisano, como en los viejos tiempos, ganándose el repudio y los aplausos de la afición.
Nostalgia, será ver caminar al Príncipe Maya, Canek, al lado de su acérrimo rival Dos Caras, enemigos a muerte en la época gloriosa del Toreo de Cuatro Caminos, pero que siempre unieron fuerzas cuando el contrincante de esquina lo ameritaba, lo harán esta vez para apoyar al Rayo en el compromiso estelar del evento Leyendas mexicanas en el coso de la colonia Doctores.
Nostalgia, será atestiguar el regreso del Satánico a su casa, el infernal mayor, el número uno; un rudo clásico que se aliará con Fuerza Guerrera y Negro Casas para configurar una tercia que roza la perfección, llena de maldad y calidad en los encordados.
Sin embargo, tendrán que soportar la vigencia del ídolo coliseíno Atlantis, acompañado de Máscara Sagrada, otro enmascarado que vivió momentos épicos en el pasado, dos estrellas que se unirán al Fantasma, quien recibió un “permiso celestial” para presentarse en un cuadrilátero capitalino, donde no lo hace desde que tomó cargó de la Comisión de Lucha local, pero ese, es otro tema.
Nostalgia, será ver al Dado de Oro, Súper Astro, compartir esquina con su viejo amigo y compadre, Solar y junto a Mano Negra despertar a la fiera que Blue Panther lleva adentro, esperando al acecho una oportunidad como esta para desde el bando de los rufianes alcanzar la gloria de nueva cuenta.
Kahoz y Negro Navarro secundarán sus fechorías, como seguramente lo hicieron en más de una batalla, hoy, sepultadas en el recuerdo pero que tomarán vida propia para deleite de los aficionados.
Se trata de un platillo demasiado tentador para la vieja guardia de aficionados, que encontrará en el ring flachazos de nostalgia que los harán revivir las hazañas que construyeron la mayoría de estos gladiadores, dotados de una aura especial que los ha mantenido de pie en los enlonados profesionales.
¡Buenas luchas!