México llegó a los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro arrastrando problemas financieros y pleitos entre las principales autoridades deportivas del país.
Con un panorama poco alentador, una delegación de 126 atletas encaró la justa veraniega con el propósito de lograr al menos cinco medallas, insuficientes para siquiera igualar las siete que se obtuvieron en Londres 2012.
El pronóstico se cumplió gracias a un par de garbanzos de a libra que salvaron la participación tricolor en los últimos días de competencia y nuestro país se ubicó en el sitio 61 del medallero general, muy por debajo del lugar 39 que ocupó hace cuatro años en la capital británica.
“Creo que los resultados fueron buenos, teniendo en cuenta las situaciones externas por las que pasaron los atletas, todos ellos dieron su mejor esfuerzo para estar entre los mejores del mundo”, expresó Carlos Padilla, titular del Comité Olímpico Mexicano al realizar un balance de la competencia.
Además de las cinco preseas; tres de plata y dos de bronce, un puñado de seleccionados lograron meri-
torios cuartos lugares que los colocaron entre la élite mundial de sus respectivas especialidades. Otros, considerados favoritos, quedaron a deber al ser eliminados en las primeras rondas.
Mención aparte merece la taekwondoína María Espinoza, quien cumplió al subir por tercera ocasión en su carrera al podio olímpico y convertirse así en la atleta femenina más ganadora de todos los tiempos, apenas superada por el clavadista Joaquín Capilla, quien obtuvo cuatro metales.
Lento inicio. Hasta el 14 de agosto, día 10 de la justa cuatrienal, el panorama no pintaba nada bien para los mexicanos. Decepcionantes
resultados en disciplinas como el taekwondo auguraban una magra cosecha nacional hasta que, de manera sorpresiva, el púgil Misael Rodríguez aseguró el primer metal.
El oriundo de Chihuahua logró el bronce en la categoría de los 75 kilogramos y con ello rompió con la sequía de su disciplina, que no subía al podio olímpico desde los Juegos de Sidney 2000. Semanas antes de la participación de los boxeadores en Río, éstos tuvieron que salir a “botear” para recaudar fondos con los que costear su participación en el Campeonato Mundial que se desarrolló en Doha.
“Ojalá las autoridades volteen a ver más al boxeo”, dijo el seleccionado, quien hace algunos días decidió emigrar al profesionalismo.
Guadalupe González hizo válidos los pronósticos. Con poco tiempo como andarina la mexiquense se adjudicó el metal argento en la prueba de los 20 kilómetros. Lupita protagonizó una feroz batalla con la china Hong Liu y cruzó la meta entre lágrimas tras convertirse en una histórica del deporte nacional. Tres meses después de su hazaña, González anunció que no trabajaría más con Juan Hernández de cara al ciclo que culminará en Tokio 2020.
Con una lesión en el hombro, el clavadista tapatío Germán Sánchez logró su segunda presea olímpica. Tras llevarse la plata en plataforma sincronizada en Londres 2012 junto con Iván García, el “Duva” subió al podio en individual para mantener a los saltos ornamentales entre las disciplinas más ganadoras.
A sus 24 años de edad, Sánchez es uno de los máximos ganadores mexicanos en la historia de los Juegos. El saltarín, por cierto, fue operado con éxito hace un par de días en Nueva York.
Uno de los resultados que más sorprendió fue el del pentatleta Ismael Hernández, quien obtuvo un bronce histórico para su disciplina. El seleccionado coronó el trabajo de más de una década luego de superar una suspensión por dopaje.
María Espinoza logró su tercera medalla olímpica. Una plata en la categoría de los 67 kilogramos reafirmó a la sinaloense como una de las máximas leyendas del deporte nacional. Espinoza no piensa en su retiro, aunque tampoco asegura llegar hasta Tokio 2020.
Alejandra Zavala (tiro deportivo), Alejandra Valencia (tiro con arco) y Diego del Real (lanzamiento de martillo) ocuparon el cuarto puesto en sus respectivas especialidades,
lo que para ellos significó un gran aliciente de cara a sus próximas competencias.
Cada uno de los medallistas de Río será galardonado el próximo 20 de diciembre con el Premio Nacional de Deportes en Los Pinos.