CIUDAD DE MÉXICO, agosto 22 (EL UNIVERSAL).- Un triunfo de Conor McGregor sobre Floyd Mayweather Jr., es una posibilidad muy remota para los apostadores. Pero también lo era el campeonato del Leicester City en la Liga Inglesa, los 25 puntos que remontaron los Patriots en el pasado Super Bowl frente a los Falcons o la coronación de los Cubs en la Serie Mundial de 2016.
Históricamente el deporte y las sorpresas han caminado juntos.
McGregor saldrá el próximo sábado desfavorecido en las casas de apuestas, pero con la posibilidad de poner en aprietos a los casinos, pues de conseguir el triunfo, la casa de apuestas William Hill deberá cerca de dos millones de dólares a sus clientes si McGregor gana, y si pierde, sólo ganará 400 mil dólares.
El irlandés es un auténtico «underdog». Por cada 100 dólares que se apueste al peleador de artes marciales mixtas, los casinos pagan entre 300 y 400 dólares. Cuando la pelea fue anunciada en mayo, Mayweather abrió las apuestas de forma abrumadora.
Su impecable récord de boxeo profesional de 49-0 colocaron a su rival, con un +950 en los momios. Sin embargo la cifra ha bajado a +300, en gran medida por la utilización de guantes de ocho onzas que autorizó la Comisión Atlética de Nevada.
Se espera que durante el resto de esta semana la cifra se vuelva menor en gran medida por el dinero que pondrán los fanáticos británicos que arribarán a Las Vegas. De acuerdo con OddsShark.com las probabilidades de McGregor están por arriba de casi todos los peleadores que enfrentaron a Mayweather Jr. desde 2011, a excepción de Manny Pacquiao y Saúl Canelo Álvarez.
Mayweather y McGreegor pelearán bajo las reglas de boxeo. Desigual o no, el combate ya generó interés entre los amantes de los deportes de contacto.
Esa exposición podría llegar a los cinco millones por la noche de la pelea, de acuerdo con Joe Asher, jefe de William Hill EE.UU., un récord de responsabilidad que asume un centro de apuestas para una sola pelea.