La tenista japonesa Naomi Osaka, número 2 del mundo y vencedora de cuatro títulos del Grand Slam, anunció este lunes que se retira de Roland Garros para que «todo el mundo vuelva a concentrarse» en el deporte, tras la polémica por haber sido sancionada con 15.000 dólares de multa por no acudir a una rueda de prensa durante el torneo.
«Creo que lo mejor para el torneo, para otros jugadores y para mi bienestar es que me retire para que todo el mundo pueda centrarse de nuevo en el tenis que se está jugando en París», anunció la jugadora en su cuenta de Twitter.
Osaka, que explicó que sufrió episodios de depresión desde el Abierto de Estados Unidos de 2018, añadió que no pretendía ser una «distracción» y admitió que no fue suficientemente clara al señalar que enfrentarse a los medios de comunicación daña su salud mental, por lo que no participó en la rueda de prensa tras superar la primera ronda del torneo.
La nipona va a retirarse de las pistas por un tiempo y «cuando sea el momento adecuado» quiere hablar con los organizadores del torneo para ver si sería posible facilitar la situación para los jugadores, la prensa y los seguidores.
Según la tenista, a su llegada a París se había sentido ansiosa y vulnerable y pensó que sería mejor cuidar de sí misma y no acudir a las conferencias de prensa. «Escribí en privado al torneo para disculparme y decir que estaría encantada de hablar con la prensa después del torneo, ya que los Grand Slams son intensos», detalló.
Osaka, que ha ganado cuatro torneos del Grand Slam (dos abiertos de EE.UU. y dos de Australia) pero ninguno en tierra batida, explicó en la misma red social el pasado 26 de mayo que no iba a hacer ninguna conferencia de prensa en este Roland Garros.
En su opinión, el encuentro con la prensa despierta inseguridades y dudas en su juego, una situación que quería evitar a toda costa.
«A menudo nos hacen las mismas preguntas una y otra vez, o preguntas que siembran dudas en nuestras mentes y, simplemente, no voy a enfrentarme a personas que dudan de mí», comentó entonces.
Además, criticó a los organizadores por imponer las conferencias bajo amenaza de multa, a costa de «ignorar la salud mental» de los tenistas.
Tras estos acontecimientos, los organizadores la multaron este domingo con 15.000 dólares por no acudir a la rueda de prensa y aseguraron que si seguía rechazando sus obligaciones mediáticas podrían incluso expulsarla del torneo.