El Universal
Durante los últimos dos años, Julio César Salazar aprendió a remar contra la corriente. Aunque es uno de los andarines con mejor proyección en la prueba de 20 kilómetros, el capitalino no siempre ha recibido el respaldo necesario para alcanzar su mejor forma deportiva. Menos con el conflicto entre las federaciones y la Conade.
“A nosotros como deportistas nos pican la cresta al no darnos todo lo que necesitamos. Si alguien nos dice que no podemos nosotros les demostramos que con lo que tenemos es con lo que vamos a trabajar y dar resultados. Siento que hace 20 años la marcha de México era potencia, pero ha dejado de ser prioridad”, dijo Julio.
Salazar, quien sorprendió al conseguir un cuarto sitio en en los Panamericanos de Toronto, expuso que sin fogueo no pueden ser muy altas las exigencias.
“No podemos evaluarnos entre nosotros mismos, no salir afecta nuestro ritmo de competencia. Es importante tener competencias internacionales previas para que en los Olímpicos la exigencia no nos agarre por sorpresa”, explicó.
Son muchas las trabas que ha tenido el seleccionado capitalino.
“Para algunas competencias como juvenil tuve que invertir mi dinero, principalmente en años donde no tuve los resultados que esperaba. Muchas veces gente muy cercana a mí me ha dicho que no tengo cualidades, incluso los mismos médicos que hacen las evaluaciones físicas, pero yo sigo con mi sueño porque tengo convicción”.
El calendario de la selección mexicana para el año olímpico se vio truncado por la falta de recursos.
“Teníamos varias competencias programadas, pero por el problema de Conade no se han concretado. Nosotros tendríamos que estar en Bolivia, pero no es así”.
Julio sabe que su participación en Río no está asegurada, pues al menos dos de sus compañeros amenazan su marca.
“Hay mucho trabajo por delante, no hay tiempo para el descanso”.
Challenger cambia de sede. El Circuito Internacional de Marcha se realizará este año en Ciudad Juárez y no en Chihuahua como en ediciones anteriores.
Antonio Lozano, presidente de la Federación Mexicana de Atletismo y Gustavo Álvarez, titular del Instituto del Deporte del estado comentaron que el cambio forma parte de una estrategia por posicionar la ciudad fronteriza.
“Empezamos con el pie derecho el año, ya que el Challenger convocará a los mejores del mundo. Confiamos en que se lograrán buenas marcas”, dijo Lozano.
El circuito será plano y de dos kilómetros para favorecer las marcas de los competidores.
Los mejores mexicanos de la competencia lograrán su boleto para la Copa Mundial de Italia. Están confirmados Horacio Nava, Eder Sánchez, Guadalupe González y Alejandra Ortega.