HOUSTON, EU., octubre 28 (EL UNIVERSAL).- Con el cuadrangular vinieron los excesos. El cubano Yulieski Gurriel de los Astros de Houston realizó un gesto racista al rasgarse los ojos con los dedos para burlarse del japonés Yu Darvish después de conectarle un cuadrangular en el Juego 3 de la Serie Mundial.
Gurriel se voló la barda en la parte baja del segundo inning y tras llegar al dugout se sentó en la banca y se estiró los ojos.
Al término del encuentro que ganaron los Astros, Darvish, lanzador de Dodgers señaló que el cubano fue «irrespetuoso» por lo que hizo.
«Cometió un error. Aprenderá de eso. Todos somos seres humanos», añadió el serpentinero que cargó con la derrota.
Gurriel no fue a la rueda de prensa y en el vestidor se metió a las regaderas alejándose de la prensa.
El cubano estaba programado para aparecer en conferencia de prensa tras el juego, sin embargo, no hizo acto de presencia, y en su lugar, hablaron McCullers y Peacock.