CIUDAD DE MÉXICO, enero 20 (EL UNIVERSAL).- Ana Gabriela Guevara observa las arcas mexicanas y, de inmediato, se da cuenta que el país no está para organizar un Mundial de futbol, con la inyección de recursos públicos que esto implica.
“No está el caldo para hacer albóndigas”, sentencia la hoy senadora por el Partido del Trabajo (PT).
Señala que la nación atraviesa un periodo de recortes presupuestales en prácticamente todos los rubros de la administración pública.
“No estamos en condiciones para estar reduciendo presupuesto en cada uno de los sectores, y en caso del Senado no se ha quedado exento. Todos hemos hecho un esfuerzo”, expone.
Ser el país sede de una Copa del Mundo implica una inversión de alrededor de 11 mil millones de dólares, de los cuales, 90% sale de los impuestos de los ciudadanos de la nación que acoja el evento, según publicó EL UNIVERSAL en junio del año pasado.
En cambio, las ganancias que deja un certamen de esa naturaleza suelen quedarse en manos privadas. Razón por la que Ana Guevara prefiere que ese dinero se destine a rubros que tengan mayor impacto en la sociedad mexicana.
“Nuestra economía no está para hacer un Mundial. Hay que invertir en otros sectores como educación, en salud”, recomienda la medallista de plata en los Juegos Olímpicos de Atenas 2004.
“El caldo no está para hacer albóndigas, reiteramos. Debemos de ponernos a pensar y reaccionar como país para saber qué es lo que queremos hacia el futuro, porque creo que la relación entre los dos países [Estados Unidos y México] no va a caminar tan tersa como en otras ocasiones”, anticipa.
El consultor Rubén Aguilar cree que al ser un evento a largo plazo, la cuestión de los recursos no debería ser el problema para la organización de una Copa del Mundo.
“Lo único que debe quedar claro es que no haya dinero público”, señala quien fuera vocero de Vicente Fox.