A pesar de que el nuevo estadio de los Diablos Rojos del México terminará de construirse antes de fin de año, según la organización, Grandes Ligas descartó el escenario capitalino de su lista de juegos 2019 en el extranjero, debido a que no está concluido nueve meses antes de la próxima campaña, como pide MLB para su certificación.
La Ciudad de México se mantiene como prioridad para el comisionado de Grandes Ligas, Rob Manfred, en su misión de expandir el beisbol, pero la oportunidad para la capital del país tendrá que postergarse hasta 2020.
“Nosotros publicamos nuestro calendario casi ocho meses antes de que inicie cada temporada. El estadio de Diablos en estos momentos no está terminado y no lo podemos calificar hasta que esté terminado”, declaró Rodrigo Fernández, director de Grandes Ligas en México.
El UNIVERSAL Deportes adelantó ayer que el próximo año se disputarán tres series de Ligas Mayores en el estadio Monterrey (una de Spring Training y dos de temporada), que darán continuidad a los tres encuentros que se llevaron a cabo en mayo pasado, en los que se enfrentaron Dodgers y Padres.
Para que el estadio Alfredo Harp Helú (futura casa de los Diablos), reciba juegos de MLB, debe cumplir con varios requerimientos, como una capacidad de 20 mil o más aficionados, así como otras exigencias en cuanto al terreno de juego y vestuarios.
El inmueble que construye el conjunto escarlata está planeado para recibir a 16 mil personas, pero podría aumentar su capacidad.
La oficina de Ligas Mayores en nuestro país también trabaja de la mano con Charros de Jalisco, para que en 2020, su recinto sea parte de la expansión y crecimiento por el que trabajan.