CIUDAD DE MÉXICO, diciembre 10 (EL UNIVERSAL).- El peleador Kelvin Gastelum no piensa más en el castigo que le impuso la Comisión Atlética de Nueva York y mantiene su mirada en un triunfo en la UFC.
Este sábado por la noche, en Toronto, Canadá, se enfrenta a Tim Kennedy, donde buscará mostrar una mejor cara tras su suspensión.
“Después de lo sucedido, quise pelear lo más pronto posible”, dijo el californiano en entrevista telefónica con EL UNIVERSAL. “Cuando esas puertas se abrieron, levanté la mano y me dieron la oportunidad”.
En noviembre pasado, el mexicanoestadounidense fue suspendido después de no asistir a los pesajes oficiales de su combate ante Donald Cerrone, en el UFC 205. Al darse cuenta que no aprobaría el peso, Gastelum optó por no presentarse.
“Hubo mucha crítica y opiniones sobre mi persona. La gente dijo cosas negativas y no me gustó nada, estuve decaído emocionalmente. Aceptó que fue un “gran dolor de cabeza”, pero que ya se siente contento y listo para entrar a la jaula.
El hijo de padres mexicanos afirmó que el enfrentamiento ante Tim Kennedy será de las más parejas en su carrera. “Tiene un estilo muy parecido al mío. Le gusta presionar y dar el salto para el frente. Somos muy similares, será cosa de quién se imponga más”.