Todo sucedió en Malaui. Aquel país africano fue el lugar en el que una pelea de boxeo terminó en una verdadera campal.
El M1 Centre Point, ubicado en Lilongue, capital de Malaui, recibió el combate entre Salimu Chazama y Alexander Likande.
El duelo en el ring marchaba con normalidad hasta que en el séptimo round Chazama derribó a Likande, quien después de un par de impactos no se logró reponer.
Apenas logró sujetarse de las cuerdas y fue ahí que alguien del público le ayudó a reingresarlo.
El réferi realizó el conteo y permitió la reanudación pese a que Alexander no estaba del todo bien. Fue ahí cuando Salimu aprovechó la situación de su contrincante y le dio algunos golpes más.
Ante la situación, uno de los auxiliares de Likande se metió a detener la pelea, empujó a Chazama y este le contestó con un golpe por detrás, cuando el auxiliar reclamaba al juez por no frenar el pleito.
Pese a que todo indicaba que ahí llegaría a su fin el evento, algunas otras personas del púbico subieron al ring y comenzaron una campal.
Después del incidente, el réferi dio por ganador a Salimu Chazama por nocaut.