El extesorero de la Federación Mexicana de Esgrima (FME), Raúl Cruz, cuenta a EL UNIVERSAL Deportes que el presidente de ese organismo, Jorge Castro Rea, alteraba o falsificaba la documentación cuando tenía que comprobar los viajes de los atletas a campamentos o pruebas internacionales.
“Para justificar los viáticos con Conade, la FME tiene que entregar los pases de abordar de los atletas. En algún viaje, entre 2011 y 2012, se perdió uno de los pases de los atletas y él [Castro] le pidió a la gerente de la FME, Analis [González], que ‘fuera a sacar uno igual’. Cuando se lo dijo, cortó de tajo la conversación, porque yo y algunos atletas estaban presentes. Luego, hablaron fuera de la oficina de la FME. Después me enteré que ella tenía un familiar que trabajaba en una imprenta”, relata Cruz, quien dejó de trabajar en la FME, en 2017, dice por esas irregularidades.
También recuerda un episodio en 2011. “Aquella ocasión encontré, en un estante en la oficina de Jorge Castro de la FME ubicada en el COM, muchas facturas en blanco que estaban en idiomas extranjeros, de establecimientos. Me di cuenta que se estaban alterando facturas, porque las facturas de esos países deben ser llenadas en esos lugares y con sellos, no dadas en blanco”, dice Cruz.
Castro niega las acusaciones. “Es difamatorio lo que dice. Él nunca tuvo acceso a esa oficina. Si tiene pruebas, que las muestre”.