La NBA afirmó que jugadores pueden regresar a las instalaciones de entrenamiento de sus equipos a partir de mañana, si así lo desean, con algunas condiciones muy específicas y sólo si los gobiernos locales y estatales han autorizado la reapertura de esos centros.
No está claro cuántos jugadores podrán volver a la duela —si es que alguno puede hacerlo— en esa jornada en que se levante una de las restricciones de la liga.
El Heat de Miami tendrá permitido abrir sus puertas por primera vez en seis semanas pero no lo hará sino hasta el lunes, en lo que resuelve algunos detalles logísticos. Magic de Orlando tampoco recibirá a los jugadores inmediatamente.
Lo mismo pasa con Jazz de Utah, el primer equipo impactado directamente por el coronavirus. El 11 de marzo, Rudy Gobert dio positivo del padecimiento Covid-19, lo que llevó a la suspensión inmediata de la temporada 2019-20.
La mayoría de los equipos no tiene permitido abrir debido a las restricciones locales. No se ha jugado basquetbol en dos meses, y la liga, los equipos y jugadores aún desean volver al trabajo, terminar la temporada y coronar un campeón.
Pero quizá consciente de las dificultades que enfrentan otras ligas en sus esfuerzos por volver a jugar en medio de la pandemia de coronavirus, la NBA se está movimiento con precaución extrema.
Las reglas a las que tendrán que adherirse los equipos de la NBA cuando regrese la liga, incluso para las prácticas voluntarias, representarán algo nunca antes visto.
Un espacio de cuatro metros entre cada persona, un jugador por canasta, un balón por cesta y no más de cuatro jugadores en las instalaciones al mismo tiempo.
Todos deberán utilizar mascarillas y guantes, excepto los jugadores durante los entrenamientos. Todos los jugadores serán sometidos a pruebas cardíacas antes de volver a los entrenamientos.
Cleveland se encuentra entre los equipos que espera abrir sus puertas a los jugadores el viernes. La próxima semana algunos equipos tendrán a sus jugadores de vuelta trabajando. Si todo sale bien, pronto los 30 equipos tendrán tiempo en la cancha.
Quizás en junio podrán entrenar juntos. Tal vez en julio vuelva la temporada. Hay varios obstáculos que superar antes de ese momento, el problema de las pruebas es el principal.