El ex manager de Mike Tyson, Shelly Finkel, reveló en charla para The Sun, lo complicado que era convivir con los tigres del histórico boxeador.
Entre su alimentación, cuidados y riesgos, Iron Mike tuvo que desprenderse de ellos. La vida de propios y extraños estuvo en riesgo en diversas ocasiones.
Si bien, se han visto muchas fotos y videos de Tyson conviviendo con los felinos, hay historia detrás que obligaron al expúgil a deshacerse de los tigres de bengala.
“La propiedad de Mike en Las Vegas estaba entre dos casas. De uno de los lados vivía un hombre de negocios que tenía dos perros. Tyson decidió dar un paseo con uno de los tigres, que vio a uno de los perros y escaló el paredón para comérselo”, relató.
“El hombre estaba mirando por la ventana, viendo cómo un tigre saltaba la pared para tratar de comerse a uno de sus perros y Mike, mientras, intentaba empujarlo hacia abajo. Al final, logró sacarlo. A la noche me llamó por teléfono: ‘Tengo aquí en casa a la Sociedad Americana para la Prevención contra la Crueldad contra los Animales porque no puedo tener gatos en cautiverio”.
Otro de los felinos, Kenia, quien vivió más tiempo a lado de Mike, arrancó el brazo a una chica y tuvieron que indemnizarla con 250 mil dólares, recuerda el exmánager de Tyson.
¿Cómo alimentaba a sus tigres?
Kenia, Storm y Boris llevaban una dieta especial. Al no vivir en su hábitat natural, tenían que comer de manera más cuidadosa.
“Carne de caballo. También les gusta el pollo, así que les dábamos carne de pollo y de caballo. Comen muy lento. No son glotones, lo saben… conservan su peso, comen lo justo”.