Han pasado muchas cosas desde aquel 17 de noviembre de 2012, cuando el nicaragüense Román Chocolatito González venció por decisión unánime a Francisco Gallo Estrada, afrenta que el mexicano buscará cobrarse este sábado, cuando se midan por la unificación de los campeonatos supermosca de la AMB y el CMB, en el American Airlines Center en Dallas, Texas.
Desde entonces, el Chocolatito no ha parado y ha construido un récord de 50-2, con 41 nocauts. Ha ganado títulos mundiales en cuatro categorías de peso diferentes, superando a su ídolo Alexis Argüello.
El Gallo ha peleado 44 veces, 28 de sus victorias por la vía rápida y tres derrotas. Tiene 30 años, es tres más joven que su enemigo de esquina. El supermosca es su peso natural, en tamaño y fuerza, le favorece más que a González, a quien sin embargo, nadie puede descartar.
“Dimos una gran pelea en 2012. Ahora con más experiencia, los dos somos campeones, los dos hemos tenido buenas peleas, los dos somos buenos en lo técnico y lo táctico”, compartió el púgil azteca.