La WWE es otra de las organizaciones deportivas que se ha visto en problemas por la nueva ola de Covid-19 que ya se extiende por todo el mundo.
Durante los más recientes días, ha habido varios contagios entre personas del staff y superestrellas de la famosa empresa de lucha libre, lo que ha provocado cambios en carteleras de eventos no transmitidos por televisión, situación que pone en riesgo algunas confrontaciones pactadas para su primer evento de 2022, que es el mismísimo sábado 1 de enero, además de que los directivos ya analizan regresar al conocido ThunderDome, que es el formato de una arena con público virtual, con el fin de evitar la propagación del virus.