Ahora es el turno de los Rams de Los Ángeles para presentarse en el Estadio Azteca, después de dos años con los Raiders de Oakland como protagonistas en el juego de la NFL en nuestro país.
No, no tienen la popularidad del otro equipo californiano o de los Patriots de Nueva Inglaterra, que estuvieron como visitantes en 2017. Sin embargo, los Rams llegan como serios candidatos para la postemporada y hasta para alcanzar el Super Bowl. Los de Hollywood tendrán como rivales a los Chiefs de Kansas City, otra franquicia sin reflectores en México, pero de tradición en la NFL.
La cita es el 19 de noviembre, en el segundo Monday Night Football fuera de Estados Unidos.
El Estadio Azteca se mantiene como sede, mas la condiciones de su cancha dejan mucho qué desear, a poco más de dos meses de la patada inicial.
Grupo Televisa contrató a una empresa para colocar césped artificial como superficie, con la intención de modernizar el inmueble, que será sede de la Copa del Mundo en 2026.
Durante los partidos de la Liga MX, el Coloso de Santa Úrsula ha mostrado una cara pobre, con una cancha en condiciones no dignas para un festejo de la NFL.
Arturo Olivé, director de la Liga en México, ha asegurado en varias ocasiones que el campo estará en buenas condiciones y no tendrá algún problema cuando Rams y Chiefs se enfrenten.
El conjunto de Los Ángeles espera conectar con sus aficionados de ascendencia mexicana. Jared Goff, Todd Gurley, Aaron Donald y Aqib Talib son las estrellas que lideran a los californianos para esta temporada.
El contrato con la NFL está vigente hasta 2021. Se desconoce qué equipos serán los protagonistas en los próximos años.