Drew Brees se disculpó el jueves por unos comentarios suyos que calificó de “insensibles y completamente equivocados» al reiterar su oposición a que Colin Kaepernick se arrodillase durante el himno nacional en 2016, lo que le valió una ola de agudas críticas por parte de luminarias del deporte y otras personalidades a raíz de la muerte de George Floyd.
Las críticas al comentario del quarterback de los Saints de Nueva Orleáns aparecieron en las redes sociales de astros como LeBron James de los Lakers de Los Ángeles, y el safety Malcolm Jenkins, compañero de equipo de Brees.
Otros de los deportistas que se manifestaron en contra del quarterback de la NFL fueron Richard Sherman, Josh Hart o Ed Reed.
“Nunca estaré de acuerdo con nadie que le falte al respeto a la bandera de los Estados Unidos”, dijo Brees al comienzo de su respuesta. Subrayó que el himno le recuerda a sus dos abuelos, que formaron parte de las fuerzas armadas durante la Segunda Guerra Mundial.
Luego de toda la polémica que terminó en ofensas para el quarteback en las protestas de Nueva Orleans, además de los deportistas que se lanzaron contra él en redes sociales, Brees lanzó un mensaje ofreciendo disculpas:
«Me gustaría disculparme con mis amigos, compañeros de equipo, la ciudad de Nueva Orleans, la comunidad negra, la comunidad de la NFL y cualquier persona a la que lastime con mis comentarios ayer. Al hablar con algunos de ustedes, me rompe el corazón saber el dolor que he causado.
En un intento por hablar sobre el respeto, la unidad y la solidaridad centrados en la bandera estadounidense y el himno nacional, hice comentarios insensibles y perdí por completo la marca en los problemas que enfrentamos en este momento como país. Carecían de conciencia y de cualquier tipo de compasión o empatía. En cambio, esas palabras se han vuelto divisivas e hirientes y han engañado a la gente a creer que de alguna manera soy un enemigo. Esto no podría estar más lejos de la verdad, y no es un reflejo exacto de mi corazón o mi carácter. Aquí es donde estoy parado:
Apoyo a la comunidad negra en la lucha contra la injusticia racial sistémica y la brutalidad policial y apoyo la creación de un cambio de política real que haga la diferencia.
Condeno los años de opresión que han tenido lugar en todas nuestras comunidades negras y que todavía existen hoy.
Reconozco que nosotros, como estadounidenses, incluido yo mismo, no hemos hecho lo suficiente para luchar por esa igualdad o para comprender realmente las luchas y la difícil situación de la comunidad negra.
Reconozco que soy parte de la solución y que puedo ser un líder para la comunidad negra en este movimiento.
Nunca sabré lo que es ser un hombre negro o criar niños negros en Estados Unidos, pero trabajaré todos los días para ponerme en esos zapatos y luchar por lo que es correcto.
SIEMPRE he sido un aliado, nunca un enemigo. Estoy enfermo por la forma en que se percibieron mis comentarios ayer, pero asumo toda la responsabilidad y la responsabilidad. Reconozco que debería hablar menos y escuchar más … y cuando la comunidad negra habla de su dolor, todos debemos escuchar. Por eso, lo siento mucho y le pido perdón”, finalizó.