Ante las bajas de Roger Federer, por lesión, y Rafael Nadal, por precaución, Novak Djokovic será el único miembro del denominado ‘Big 3’ que participará en el US Open entre el 31 de agosto y el 13 de septiembre.
Aunque se anticipa un certamen extraño al no contar con los dominantes más longevos de la ATP, el serbio no considera que la presencia de sus dos más grandes rivales sea determinante para la la relevancia del major estadounidense.
“Ambos son leyendas del tenis y se les va a extrañar, pero su ausencia no disminuirá la importancia de este torneo, ya que la mayoría de grandes jugadores está aquí”, dijo el actual número uno del mundo.
De coronarse en Flushing Meadows, ‘Nole’ tendrá 18 títulos de Grand Slam y mayor probabilidad de alcanzar y superar al suizo y al español, situación que, reconoce, no ha pasado desapercibida en su mente.
“Está claro que buscar el 18 fue un factor importante para venir. Una de las razones por las que sigo jugando a este nivel es porque quiero llegar más alto. No puedo decir que esta sea la principal razón por la que estoy aquí, pero definitivamente cuenta”, admitió.
Djokovic le confesó al New York Times que consideró la opción de renunciar a jugar en Nueva York, luego de todo lo que se comentó alrededor de su persona –por un previo contagio de Covid-19 tras el Adria Tour- y la situación sanitaria general.
“Estuve muy cerca de no venir. Había mucha incertidumbre, y creo que ahora mismo algunas cosas siguen sin estar claras del todo. Pero quiero jugar, por eso estoy aquí. Personalmente, no me da miedo estar en una situación donde hay cierto riesgo para la salud”, finalizó.