El prolífico ataque de los Cowboys tendrá una de las pruebas más duras para tratar de mantener el liderato en el Oeste de la Conferencia Nacional: los Patriots.
Dallas, la mejor ofensiva de la Liga y que produce 312 yardas por juego, se mide a la defensa de Nueva Inglaterra, que sólo en tres ocasiones permitió más de 300 yardas del equipo rival.
Los de texanos no son los únicos que estarán a prueba. Nueva Inglaterra fracasó en su intento de frenar a un ataque élite al caer ante los Ravens, ahora tratará de no volver a fallar: debe frenar a Zek Elliot.