El Universal
El promotor Bob Arum, representante de los intereses del púgil filipino Manny Pacquiao, no tiene ningún inconveniente en aceptar la revancha ofrecida por el campeón invicto estadounidense Floyd Mayweather Jr., que el pasado sábado ganó a su pupilo por decisión unánime.
A pesar de que Pacquiao será operado hoy en Los Ángeles del desgarro que sufre en el manguito rotador del hombro derecho, lesión que ahora, de acuerdo a Arum, arrastra desde el año 2008, cuando se enfrentó al estadounidense Oscar De La Hoya, y necesitará un año de recuperación, Mayweather Jr. está dispuesto a esperar.
Arum reconoció que montar la primera pelea, que les costó seis años de espera, no fue una misión fácil, al tener que trabajar en la promoción con un enfrentamiento directo de intereses de su compañía y la cadena de televisión HBO frente a Mayweather Jr. y Showtime.
Sin embargo, esa experiencia, difícil, podría facilitar la pelea de revancha porque ambas partes han visto lo beneficioso que ha sido para todos, destacó Arum en declaraciones ofrecidas a la cadena ESPN.
«Nunca habíamos visto algo igual en cuanto a los datos que estamos recibiendo sobre lo recaudado por la pelea», subrayó Arum, de 83 años.
El veterano promotor fue aun más allá al asegurar que Mayweather Jr. había entendido que, sin Pacquiao, nunca podría haber logrado los ingresos que tuvo con su bolsa y lo que se pueda recaudar de la televisión de pago, ni tampoco Pacquiao hubiese hecho lo propio sin el campeón invicto estadounidense.
«Pienso que todos conocemos ahora en lo que fallamos, pero también en lo que ha dejado de positivo la organización de una pelea como la que protagonizaron Mayweather Jr. y Pacquiao», valoró Arum.
En este sentido, Arum adelantó que le sugeriría a Mayweather Jr. que se olvidase de pelear de nuevo en septiembre y esperase al mes de abril del 2016, cuando Pacquiao esté recuperado y protagonicen la revancha en el nuevo MGG Grand Garden Arena, que se construye en Las Vegas (Nevada) con una capacidad para 20.000 espectadores.
«Creo que el mejor camino para Floyd (Mayweather Jr.) es esperar», reiteró Arum, que confirmó que Pacquiao pasará hoy por el quirófano. El cirujano Neal ElAttrache le reconstruirá el músculo desgarrado, un proceso que podría durar hasta tres horas; el púgil será luego dado de alta.
«Primero tendremos que asegurarnos de que el manguito rotador cure bien», comentó Arum. «El doctor ElAttrache es un cirujano famoso, uno de los mejores en esa especialidad, y tengo confianza en que la operación va a ser todo un éxito y, si lo hace, por qué el ofrecer una revancha».
Arum no quiso entrar en detalles sobre la polémica surgida con la ocultación de la lesión de Pacquiao, la demanda colectiva que ya le han puesto dos residentes de Las Vegas y el posible castigo que reciba por parte de la Comisión Atlética de Nevada, que ha abierto una investigación a través de la fiscalía del estado de Nevada.
Nada de eso le preocupa a Arum, sino la recuperación de Pacquiao y, luego, que si se concreta la pelea revancha, su pupilo esta vez no aceptará el 40 por ciento de la bolsa, sino que habrá un reparto (50-50).
El veterano promotor adelantó que no iba a negociar una posible revancha a través de los medios de comunicación, pero que sería la mejor opción para todas las partes.
Especialmente después de conocerse los primeros datos que van recibiendo de los ingresos de la televisión de pago y que, de acuerdo a Arum, son muy esperanzadores porque batirán todas la marcas previstas y pueden superar los cuatro millones de compradores, que abonaron un promedio de 100 dólares cada uno.