Alex González arrancó su aventura en el beisbol profesional con la franela de los Diablos Rojos del México, pero el destino lo llevó pronto a otro territorio. Se convirtió en estrella con los Guerreros de Oaxaca, donde pegó más de 70 cuadrangulares y superó las 400 carreras impulsadas.
Después de 14 años como profesional, está de vuelta en el infierno capitalino, así haya tenido que ser en lugar de uno de los ídolos de la organización, Carlos Figueroa, quien ahora es parte de la novena de Oaxaca.
El llamado Spider Man no piensa en las comparaciones y se aferra a su talento para ayudar a la novena roja a buscar el campeonato en la campaña que está por iniciar: “Estoy agradecido por esta oportunidad y trabajando como siempre, apoyando al equipo. Mi meta es ser campeón, eso es todo”.
A su edad (36 años) y con el camino andado en los diamantes, pocas cosan lo deslumbran, así que de su paso por los Guerreros a estar de nuevo con el México, solo encuentra una diferencia.
“El estadio. Jugué muy a gusto en Oaxaca e igual lo voy a hacer de vuelta en los Diablos Rojos. Vengo a representar al equipo y a demostrar en el terreno de juego, es lo que más me interesa”.
Lo cierto es que el reto de ser campeón sí lo tiene que vivir de manera distinta, pues ahora está en la organización más ganadora de la Liga Mexicana de Beisbol, misma que arrastra una sequía de títulos que urge terminar.