Por Alejandro Ávila
El nuevo director del Instituto Veracruzano del Deporte (IVD), David Fernando Pérez Medellín, reconoció haber conocido hace unos días a quien fungirá como subdirector del Deporte en el Estado, el exfutbolista, Francisco Bravo Bravo, quien durante su paso como Director del Deporte en el municipio de Veracruz, cuando el priísta Ramón Poo Gil fue alcalde, fue señalado de desvió de recursos al presuntamente aplicar mal los recursos federales en unidades deportivas.
Esto presume un posible caso de imposición, pues el presidente de la Asociación de Deportistas Masters, Pérez Medellín, no escogió a su círculo más cercano, si no que le fueron acomodadas personas en diferentes puestos.
Cuestionado al respecto de, si podría generar un problema de «golpeteo político» los señalamientos en contra de Francisco Bravo, en su pasado como funcionario, expresó.
«Con Francisco Bravo apenas tuve el gusto de conocerlo y estamos ya trabajando. En este caso es parte del IVD y vamos a hacer un equipo en sentido de trabajo, estrictamente (…) no te podría decir mucho, apenas conozco al compañero, lo conozco de hace tres días y la mística aquí va a ser de trabajo exclusivamente», subrayó.
Pérez Medellín, dijo que seguramente las instancias correspondientes harán un trabajo exhaustivo e intenso, en las auditorias que se hagan al IVD, pues existen quejas de atletas y entrenadores en cuanto a pago de becas, pero aseguró que la prioridad en su cargo, será suministrar calidad en el servicio y optimización de instalaciones.
Finalmente, habló al respecto del edificio sede del IVD, mismo que se encuentra abandonado y al borde de la ruina, pues en dos años de la pasada administración no se le invirtió un solo peso para su mejora y en cambio, se cambiaron las oficinas administrativas al Centro de Raqueta, unos metros más adelante.
«Primero hay que checar si existe un daño estructural que impida el uso regular, pero eso tendrá que ser la dependencia adecuada quien tenga que presentar un dictamen o Protección Civil en su caso. La idea es darle el seguimiento adecuado ante Gobierno del Estado para que la instancia correspondiente pueda proveer los recursos y echar a andar ese edificio que es un patrimonio básico del Instituto».
En 2017, se dijo que el presupuesto solicitado a la Secretaría de Infraestructura y Obra Pública (SIOP), para la remodelación total del edificio, fue de 8 millones de pesos, recurso que finalmente no fue autorizado.